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Nuestro apartamento y vivir en Cancún

Vivir en Cancún

Nuestro apartamento y vivir en Cancún

Al principio debo mencionar primero que el nivel de vida no se puede comparar en absoluto con el estándar alemán. Personalmente, lo que más echo de menos, por sutil que parezca, es la bodega, que es amada y venerada por casi todos los alemanes. Los sótanos simplemente no existen en México y ni siquiera tenemos un depósito adecuado.

Los edificios no solo difieren en su apariencia, el método de construcción no se puede comparar en absoluto con los alemanes. No quiero decir que las casas y apartamentos regulares sean terribles, prefiero llamarlos “acostumbrarse”. Cualquiera que haya estado aquí entenderá lo que quiero decir con eso. Sin embargo, también hay algunas buenas áreas donde puedes encontrar propiedades realmente agradables.

Mi novio y yo vivimos bastante “lujosamente” según los estándares locales. A mis ojos, muy europeo y normal como lo conozco de Düsseldorf.

Vivimos en las llamadas ” Torres del Malecón “. El complejo residencial aún es relativamente nuevo, por lo que es moderno con mucho vidrio y blanco. Cada torre cuenta con piscina comunitaria y gimnasio. Además, al igual que los hoteles, disponemos de recepción con personal de seguridad. Eso puede sonar un poco extraño al principio, pero es completamente normal aquí. Casi todos los complejos de apartamentos tienen esto. Los visitantes tienen que entregar su legitimación al entrar y firmar una especie de libro de visitas con la hora y la firma. Al salir del edificio, la visita se cancela nuevamente y el visitante recupera su legitimación. Lo que es práctico para mí es que todos mis paquetes son aceptados allí y no hay necesidad de esperar el pedido en línea.

Vivimos en un amplio apartamento de 3 habitaciones con dos baños y un gran balcón. El balcón con su vista es mi lugar favorito personal en el apartamento.

Miramos directamente a la “Laguna Nichupté” y al “Malecón Tajamar”. Por otro lado tenemos vista al mar y podemos ver hasta “Isla Mujeres”. Por la noche vemos el skyline de la “Zona Hotelaria”.

Qué puedo decir, me encanta esta vista y es exactamente por eso que realmente quería vivir en estas torres.

La infraestructura aquí también es perfecta para mí, ya que no tengo auto propio aquí en México.

Vivimos justo arriba del centro comercial Plaza las Américas. Tenemos de todo allí, gimnasio, cine, varias tiendas y un supermercado. Lo más destacado para mí, por supuesto, es que puedo conducir mi carrito de compras hasta mi apartamento. ¡Adiós a las bolsas de transporte!

Ah, y ahora vivo directamente encima de Zara, probablemente no necesito explicar lo feliz que estoy por eso. La navegación diaria es evidente.

Necesitamos unos 15 minutos en coche o autobús para llegar a la playa. Esto es especialmente práctico los fines de semana, ya que siempre tenemos “día de playa” el sábado y “tiempo de piscina” el domingo.

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